Noche de tambor fallido: Quirkyoddgirl en Málaga
La sala, casi a oscuras. Los servicios con pintadas y pegatinas por todos lados. Un escenario pequeño y acogedor es donde actúan dos pedazos de bandas indie: Quirkyoddgirl y Gentileza. Esta noche promete. Y más cuando empieza Gentileza. El sitio se llena de música noise pop. Suena ‘Twin’. Así se inicia el viaje hacia Marte, como se llama esta sala de Málaga. Un despegue de seis minutos que se hace cortísimo por cómo lo disfruta la gente. El ambiente va arrancando con cervecita en mano para muchos y muchas.
‘Una última salve’, ‘Biznaga blanca’ –que no tenía nombre hasta esta noche–, y ‘Quién quiere ser feliz teniendo algo por lo que luchar’ también forman parte del camino hacia al planeta rojo. Rojo, aunque los encargados del trayecto vayan vestidos de negro y otros colores oscuros. Además, el vocalista llama a sus amigos José y Andrea que vienen de Madrid para colaborar con ellos en la canción que tienen juntos, ‘Nuestros funerales’. Andrea canta mientras José toca la guitarra dándole con todas sus ganas.
Hora del descanso entre grupo y grupo. En un lateral del local se encuentra una mesa. Una chica vende bolsas de telas con el logo de Gentileza. La mitad del público decide comprarla antes o después del show, así que se ven muchas aparte de las que traen ya algunas personas. En este mismo rato, muchas se sientan en una especie de sofá que hay alrededor de la pista de baile. Otras aprovechan para ir a la barra y pedir algo para beber.
Tras veinte minutos, Álex, el guitarrista de Quirkyoddgirl, le llama la atención a la gente y a los cuatro chavales que juegan al futbolín. Se oyen risas. Toda la sala se acerca al escenario. El bolo rompe el silencio con ‘Hello’. Buena forma para saludar a la peña, sí. Pero, una vez lo terminan, un tambor de la batería se rompe. Toca arreglarla, cosa de la que se hacen cargo un músico de Gentileza y el técnico de sonido del local. Mientras tanto, la Quirky cambia el orden de la setlist.
La noche quiere que comience mejor con temas tranquilos y algo tristes. Entre ellos se encuentran ‘Canción triste para decir adiós’ y ‘Nadie’. “¿A quién le gusta Sen Senra?”, pregunta Noor. Cuatro o cinco personas responden afirmativo y suena ‘Ya no te hago falta’, tema que cantan también esas mismas.
Como la batería sigue en el taller, sortean una púa de Pink Floyd. “Venga. Decid un número del 1 al 35”, indica Álex. Lo acierta una chica de la primera fila eligiendo el 13. Luego Mar Louise, cantante indie ajena al grupo pero que esta vez está de bajista, cuenta una anécdota. Conoció a un chico extranjero de Tinder que vino a Málaga unos días. Resultó que era el exnovio de su prima, así que fue gracioso. El público se descojona con ella.
Justo después de las risas, sacan el tambor arreglado por fin. El concierto de Quirkyoddgirl vuelve al ruedo. La gente vitorea fuerte. “Hoy es el día de los fallos”, comenta Álex y un chico de fuera del escenario discrepa soltando que no, que es el día de la Hispanidad. Se oyen algunas risas. Quirky se pinta los labios de rojo antes de reanudar. Los movimientos de los cuerpos se aceleran acompañados de ‘Amigos’. Esta canción se la saben todos y no la cantan, gritan. Y más los amigos y amigas de Noor, que están en el lado derecho de las primeras filas.
Antes de dar por finalizada la actuación, Quirkyoddgirl homenajea a Bad Gyal porque les encanta. Tocan ‘44’ en una versión muy indie. La vocalista se coloca unas gafas de sol y baja del escenario. Toda la sala la conoce o por lo menos se divierte igual que quienes la conocen. Muchos movimientos de cabeza y espalda para arriba y para abajo. Así termina esta noche especial. “Y a ti te da miedo que me guste otro”. Una última canción con la que muchas salieron de allí cantándola en sus mentes.
Periodista con conocimiento en cultura, sobre todo, cine y música. También guionista de ficción y documentales.
Malagueña, futura comunicadora audiovisual enamorada del mundo de la fotografía y de la música. Aquí puedes ver mis fotos de conciertos y festivales.