Zaragoza vibra con el indie en el FIZ
Crónica y galería del Festival Independiente de Zaragoza
El pasado sábado volvimos a acudir al Festival Independiente de Zaragoza (FIZ) en su vigésimo primera edición en la sala Multiusos. Miles de personas volvieron a congregarse para una tarde-noche de pop independiente nacional.
Fue la zaragozana Elem la primera en subir al escenario, con sus bases electrónicas y su rollazo habitual. La artista local recordó baladas de su EP «Planeta de Cristal», como ‘Llévame lejos’ y acabó con sus temas más animados y dance como ‘Guárdate el drama’ (que dicho sea de paso, canción que me he guardado en varias playlist). La verdad es que no escuchaba a Elem antes del festival, y debo recomendarla encarecidamente, con reminiscencias de Zahara o incluso en alguna base podemos incluso intuir a Billie Eilish. Salgo con muchas ganas de escuchar qué más tiene que contarnos Elem de aquí en adelante.
A continuación, llegó el que para muchos podría considerarse las cabezas de cartel, las tías más chulas del panorama indie español (todo esto es subjetivo): las Ginebras. Que pese a haber estrenado disco este año, no lo recorrieron entero, sino que optaron por un repertorio que junta canciones de sus anteriores trabajos, como ‘Paco y Carmela’, ‘La típica canción’ o ‘Con Altura’, con temas de su último disco «¿Quién es Billie Max?», como ‘Rapapa’, ‘Billie Max’, ‘Gracias por venir’ y ‘Ansiedad’, entre otras. Destacar que el concierto coincidió con el cumpleaños de la batería de la banda, Juls Acosta, a la que todo el público tuvo a bien cantarle el cumpleaños feliz. Este fue sin duda el concierto más multitudinario de la velada, y creo que merecido. Es la segunda vez en medio año que vienen a Aragón, y no puedo esperar a la tercera.
Tras bandas emergentes como Ginebras o Elem, llegó el grupo con más trayectoria del cartel, Sidonie, banda que nos acompaña desde hace más de dos décadas, manteniéndose siempre entre los grupos más escuchados del indie en español. La banda de Barcelona hizo un recorrido dando pinceladas de todas sus etapas. Cerrando como no podía ser de otra forma, con ‘Fascinado’, ‘Carreteras Infinitas’ y ‘El Incendio’.
Más adelante, acercándonos a la media noche, llegó Carlos Sadness, con toda la buena vibra que le caracteriza. El repertorio fue un mix de sus discos «Idea Salvaje», «Diferentes Tipos de Luz» y «Tropical Jesus», contando también con canciones que ha ido sacando sueltas. Estrenó ‘La Ternura‘, tema compuesto para una película participante en el Festival de San Sebastián, y cerró con ‘Qué Electricidad’. Fue un concierto muy animado y plagado de interacciones con el público, al que se ganó desde el principio e hizo cómplice desde el primer al último acorde.
En un horario más golfo salieron al escenario los chicos de Cupido. Desde «Préstame un sentimiento», con himnos como ‘Milhouse’, ‘No sabes Mentir’ o ‘Autoestima’, a canciones de su último álbum, «Sobredosis de amor», como ‘Santa‘, ‘La pared‘, ‘Un cabrón con suerte’ o ‘Se apagó‘. Si bien es cierto que estos muchachos sacan álbum cada tres años, puedo decir que al menos a mí, si son de esta calidad, me merece la pena la espera. Un público entregado y un repertorio bien elegido hicieron de este concierto mi favorito de la noche.
Casi cerrando la noche llegó Alizzz, el chico que, como él mismo dice, empezó tarde su carrera como cantante. Pese a su escaso repertorio, cada una de las canciones fue increíble en el directo. Incluso las que son colaboraciones, como ‘El Encuentro’ o ‘Sexo en la playa’ (mis favoritas y creo que las de media España) sonaron de diez.
En general todos los conciertos fueron increíbles, pero al menos yo puede que echara en falta alguna colaboración, como la versión de ‘Autoestima‘ en la que participa Alizzz, que es cierto que Lola Índigo no estaba, pero creo que es una ocasión desaprovechada. Al igual que la versión de ‘La Historia Interminable‘ en la que cantan Magüi y Marc Ros, cantantes de Ginebras y Sidonie respectivamente. Pese a esto, que igual la decepción vino fruto de mis expectativas, un FIZ para la historia y con ganas de conseguir ya mi entrada para el siguiente.
Y no quiero acabar sin mencionar a Face Down Ass Up, una fiesta mítica en Zaragoza que nos hizo bailar desde los más melancólicos a los más jóvenes. La mejor forma posible para cerrar la velada del FIZ.
Fotos de Josema Molina @jooooooooooooooooooo_
La galería completa del festival: