Un feliz día de la Ginebridad en el WiZink Center
La banda Ginebras hizo historia este 12 de octubre dejando una gran huella morada en el indie-pop español estrenándose en el WiZink Center de Madrid
Si hay algo que caracteriza a Ginebras es su capacidad para hacer de sus conciertos espacios seguros llenos de amor y sinceridad. Este amor comenzó desde el primer momento gracias a la compañía de la gran familia Vanana Records con Trashi y Elyella como teloneros. La variedad de sus estilos musicales desde el pop, el indie y la electrónica lograron los primeros saltos y cantos del público, en esta gran fecha del Billie Max Tour, con el nombre de su segundo disco de estudio.
Llegó el momento esperado y en la oscuridad empezaron a brillar aquellas luces de un escenario que era la viva imagen de aquella montaña rusa que estaba a punto de comenzar. Siendo el concierto más largo hasta la fecha de Ginebras; compuesto por Magüi (vocalista y guitarrista), Sandra (guitarrista), Raquel (bajista) y Juls (baterista), mantuvieron la energía y la perplejidad del cumplimiento de un sueño de principio a fin con una técnica musical limpia muy trabajada.
Iniciando sus letras sobre la frustración amorosa con ‘Alex Turner’ y sus guitarras rockeras, los primeros confetis tiñeron de color el aire. Tampoco pudo faltar su homenaje a ‘Crystal Fighters‘ que da nombre a aquella canción dedicada a los buenos momentos festivaleros junto a las amigas de toda la vida. Lo que estaba claro es que tras su tema ‘La ciudad huele a sudor‘, el WiZink ya estaba sudando al completo y listo para cantar sobre lo mucho que gusto el postureo con ‘Filtro Valencia’, canción que rememoraba la banda tras mucho tiempo sin estar en su repertorio habitual.
No faltaron tampoco los invitados durante toda la noche, empezando con Karavana, amigos del sello discográfico con los que tocaron ‘Lunes Negro’. Aunque para muchos será un viernes negro con resaca emocional postconcierto, la letra de esta canción deja clara la espiral sombría de una cotidianeidad pesada. Por otra parte, Elyella volvieron al escenario para darle cuerpo a ‘Bailando mal’ con una vuelta al sonido de discotequeo ochentero. Además, ¿qué puede haber mejor que bailar ‘Qué gozadita’ a ritmo de la Escuela bQE (Batucada que entiende). Por si alguno de los presentes aún no se había sentido conmovido, Magüi marcó el ambiente íntimo tocando en el piano ‘Muchas gracias por venir’ junto a un cuarteto de cuerdas que puso los pelos de punta mientras el WiZink se llenaba de linternas de móviles alzadas. Si grabar en Abbey Road es un hito, no cabe duda que estrenarse en el WiZink no puede describirse con palabras.
Por si fuera poco, una trompeta y un trombón se unieron a la fiesta para dar fin al temazo ‘Omeprazol’ lo que hizo bailar a todo el público y a falta de la aparición de Dani Martín para cantar ‘Desastre de persona‘, la sorpresa fue el salto al escenario de Eva Soriano, que lo dio todo emocionada ante la multitud. Tras un ‘Paco y Carmela‘ digno de plaza de pueblo, llegaba ‘La típica canción’ que arrasó con las voces de todos los presentes entre globos caídos del cielo. Presentada en 2019, da cuenta de la manera en la que ha crecido este grupo y la guerra que todavía le queda por dar en este Billie Max Tour que llega a toda España.
Solo queda agradecer a Ginebras su capacidad para dar voz tanto en forma de canción como en forma de discurso a los problemas y disfrutes del día a día. El mal de amores, las dudas, la ansiedad, la alegría, la fiesta, las amigas, las reivindicaciones políticas afines al colectivo LGTBIQ+ y el apoyo incondicial al panorama musical femenino del país. Por eso, hay que gritarles como fans, críticos y familia que no hay síndrome del impostor que valga, ¡que ya han hecho su primer WiZink! Aunque ellas lo tengan más que claro por su valentía.
Foto de portada de Gloria NM
Intento de filósofo apasionado por la música