Cala Vento tocan techo en su acecho a Madrid

/ febrero 1, 2021/ Crónicas, Galería

Cala Vento es uno de esos grupos que no sufren la llamada «cuesta de enero», muchas bandas sufren el efecto del frío que, acrecentado con la pandemia, siempre hace complicado arrastrar al respetable a las salas. Sin embargo, como una auténtica feria de atracciones recién llegada a la ciudad Cala Vento fueron un auténtico reclamo para los habitantes de Madrid y localidades que acudieron al Teatro Circo Price para ver el concierto del dúo catalán dentro del ciclo Inverfest, una cita que pese a solaparse con Sidonie como parte del propio ciclo de conciertos, consiguió que el público llenara hasta la bandera el concierto de los de Montgrí el vieres 29 de enero.

Ver a Joan Delgado y Aleix Turón sobre el escenario se ha convertido en un eclipse. Una auténtica obra celestial difícil de ver y que pese a conocer al dedillo su funcionamiento, siempre deja boquiabierto. Cuando todos esperábamos que sobre el piano instrumental de «Fin de ciclo» que los asiduos al ritual de Cala Vento acostumbramos a escuchar para recibir al dúo, nos recordaron que no están hechos para quedarse parados. Con una preciosa versión minimalista del éxito de 1972 «Il mio canto libero» de Lucio Battisti, la voz de Aleix consiguió crear un silencio sepulcral de admiración ante lo que estaban oyendo que contrastó con los aplausos y vítores a un «Solo ante el peligro» que dedicaron a Pablo Hassel. Como una predicción que el tiempo dirá cómo de afinada será «Un buen año» se gritó con la intención de aprovechar hasta la última gota de un tiempo que parece maldito y que Cala Vento llenó de amor con «Antes de él» y «Unos pocos y otros tanto«.

El dúo catalán no quiso quedarse en el ‘Balanceo‘ (2019) que tantas alegrías les ha traído y pintaron el techo del Price de constelaciones sólo capaces de verse en noche abierta. Pese a la contaminación lumínica de la capital española, «La estrella de Ballet» brilló con la fuerza necesaria para tumbar una ley marcial. «6.000.000.000» añadió un punto más de reivindicación en el setlist antes de teñir de calor sus «Historias de bufanda» con el que los presentes empuñaban con fuerza esos «te jodes y bailas, disfruta de la vida» que tanto llena gritar. Con «Fetén» Cala Vento cerraron el breve pero intenso repaso a los temas de ‘Fruto Panorama‘ (2017) con el que empezaron a diseñar sus siguientes canciones. Aleix tiró de oficio e hizo valer con «Arquitectura» la importancia de unos buenos cimientos que sirvieron para arrancarse con los clásicos «Estoy enamorado de ti» y «Todo«.

No pudo haber un mejor escenario posible para que Cala Vento se decidiera a dar la bienvenida al mundo a «El acecho (¿cómo se deja de llorar?)«, una de las dos canciones que la banda estrenó el mismo viernes 29 como parte de un mini LP. Rompiendo los esquemas de todo acecho, la caza precedió al sigilo y tras el vibrante inicio de «El acecho«, el aplauso del público que todavía no está familiarizado con la canción sirvió de puente para que Joan dejara la batería y se pusiera al frente junto a Aléix con una guitarra acústica con la que se generó una atmósfera realmente íntima con la que el público quedó embaucado ante la voz del batería que, como nos tiene acostumbrados, cada vez que se pone al micrófono para interpretar «La importancia de jugar al baloncesto» deja los ojos vidriosos. En esa misma posición y aprovechando la inercia hacia la lágrima fácil Cala Vento estrenó en directo «Casa linda», una de las canciones en las que la banda está trabajando.

Cuando la calidez nos había acostumbrado al rasgueo de voz y guitarra de Joan, éste volvió a su trono para que Aleix nos devolviera el rock que une voces y sentimiento en «La Comunidad«. Sin que las estrictas restricciones provocadas por el Covid-19 permitieran a Isabella que los presentes se levantaran a pesar de ella, «Gente como tú» dejó a los cientos de fans de Cala Vento al borde del asiento. En este colofón final de éxitos hubo por supuesto tiempo para también probar el directo de «Teletecho«, la nueva canción firmada junto a Eva Amaral y Juan Aguirre que varios de los presentes ya se atrevieron a entonar. Un auténtico hit de rock puro y duro con el que dejarse la voz y el corazón, de estos que quitan el sueño como una excursión en el colegio a un niño.

Una vez más Cala Vento se volvieron a subir a lo más alto para demostrar que ellos son más de tener teletecho a tener un techo que cada día superan. Con «Abril» e «Isla Desierta» el Teatro Circo Price coreaba al unísono cada una de las frases de los dos mayores hits de los catalanes que decidieron cerrar el círculo y acabar el concierto con la emotiva y melódica «Fin de ciclo» antes de recibir una larguísima ovación por parte del público que agradeció el recital de hits al ritmo de la versión original de «Il mio canto libero«. En un mundo que vive sin amor, Cala Vento siempre andan al acecho para ser la canción que nos hace sentir libres. Del techo ya sólo les queda tocar un cielo que tienen ganados.

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Wrestler con gafas. Director frustrado de documentales sobre grupos pequeños. Generación vacía.

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Tossuderia d'argelaga. Hablo de música y fotografío conciertos.

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