Simple Plan llenan el Sant Jordi Club

/ enero 26, 2024/ Crónicas, Destacados, Galería

Los pop punk kids están más vivos que nunca. El revival de los grupos emo, de los grupos que hace diez años (o bastantes más) te incluían en el grupo de la gente “diferente” están de vuelta. Así lo podemos ver con festivales como el Mad Cool, en los que artistas como Sum 41, Avril Lavigne o Bring Me The Horizon están en las primeras líneas del cartel. Así lo hemos vivido con Simple Plan.

Dentro del tour europeo, tuvimos la suerte de que Simple Plan hiciera parada en Barcelona, porque muchos grupos ignoran la existencia de la península dentro de esta parte del tour. Acompañados de Air Yel, Mayday Parade y State Champs, la vuelta a la adolescencia fue fácil.

Dio comienzo a la noche Air Yel, que tuvo la oportunidad de presentar ante el público varias de sus canciones, como ‘WONDERING’, y un par de covers. Descubrimos que la chica encargada de grabar los vídeos para las historias de Instagram de Simple Plan tiene un vozarrón.

A continuación, Mayday Parade, que no pisaban España desde hace 8 años en la Sala Caracol de Madrid, ofrecieron un set corto pero intenso. Un repaso a toda su discografía (la de llorar y la de no llorar tanto), con canciones como ‘Oh Well, Oh Well’, ‘Anywhere but Here’, ‘Piece of Your Heart’, o ‘More Like a Crash’. Derek Sanders, descalzo durante todo el concierto, se hizo con el escenario y con toda la gente que había estado esperando el regreso de Mayday Parade. El concierto acabó con tres canciones que cualquier emo de bien que haya tenido una adolescencia complicada probablemente se supiera: ‘Kids in Love’, ‘Jersey’ y ‘Jamie All Over’. Hasta aquí la primera parte de las lágrimas.

State Champs subieron después al escenario. Derek DiScanio, Ryan Scott Graham, Tyler Szalkowski y Evan Ambrosio habían elegido las próximas diez canciones que disfrutaría el público del Sant Jordi Club. Aunque ahora era más el momento de los pop punk kids que de los emos, también habían pasado unos ocho años de la última vez que State Champs habían pisado España, en la Sala El Sol de Madrid. ‘Secrets’, ‘Everybody but You’, ‘Elevated’ o ‘Mine is Gold’ fueron algunas de las canciones que nos acompañaron en ese rato que ojalá hubiera durado más. La fuerza del grupo de Nueva York conquistó el recinto sin ningún problema, y la complicidad entre los cuatro miembros hacía que el público tuviera más ganas de estar ahí y disfrutar.

Llegó el gran momento de la noche. Veinte canciones nos separaban del final del día, y lo saboreamos como si fuera la última vez que les viéramos. Simple Plan se convirtieron en uno con el público y la hora y media pasó tan rápido como cuando ves tu película favorita.

Pierre Bouvier, Chuck Corneau, Jeff Stinco y Sébastien Lefebvre hicieron un repaso por toda su extensa discografía. Comenzaron con ‘I’d Do Anything’, ‘Shut Up!’ y ‘Jump’, e invitaron al escenario a Air Yel para ‘Jet Lag’. Continuaron con ‘Addicted’ y ‘Promise’. Esta última no la tocaban en directo en formato eléctrico desde 2010, así que fue todo un regalo para los asistentes. Llegaron algunos hits como ‘Welcome to My Life’, ‘Summer Paradise’ con todas las pelotas de playa gigantes y ‘Astronaut’, con la que más de uno y de una (entre las que me incluyo públicamente) soltamos los lagrimones. Cuando tienes 14 años y los sentimientos a veces son difíciles de gestionar, hay canciones como ‘Astronaut’ que a muchos nos hacían sentir menos solos, acompañados en aquella peculiar situación.

Continuaron con un medley de ‘All Star’, ‘Sk8ter Boi’ y ‘Mr. Brightside’, además de ‘What’s New Scooby Doo?’. Presentaron algunas de las canciones de su último álbum, «Harder Than It Looks» (2022), como ‘Million Pictures of You’ y ‘The Antidote’. Derek DiScanio se subió al escenario para la canción que tienen juntos, ‘Where I Belong’.

El bis lo acabaron con un medley de ‘Crazy’, ‘Perfect World’, ‘Save You’ y ‘This Song Saved My Life’ (otra de las canciones clave de mi adolescencia), ‘I’m Just a Kid’ y las lágrimas correspondientes, ‘Untitled’ y ‘Perfect’. Chuck aprovechó la oportunidad para hacer crowd surfing, que el público recibió y apoyó con los brazos abiertos, acompañando al batería en el círculo perfecto que consiguió trazar entre la marabunta de gente. Con un par de intentos fallidos de hablar catalán y otro par de aciertos al hablar castellano, Simple Plan se despidieron de una noche perfecta prometiéndonos que volverían. Nosotros solo podemos esperar que sea verdad.