Entrevista a La Otra: «El ideal de la ideología dominante es la independencia absoluta, pero yo creo que nunca existimos solas»

/ marzo 26, 2021/ Entrevistas

El 29 de mayo podremos ver a Isa, la cantautora que creó el proyecto La Otra en el Teatro EDP de Madrid, pero hasta entonces, esta gran música nos presenta ‘Nunca Canto Sola‘, el segundo adelanto de su próximo disco, «Incendio«. Hemos tenido la oportunidad de charlar con ella sobre hermandad, feminismos, la industria musical y toda la lucha que nos queda por delante, en el marco de una trayectoria musical de ya 10 años. Con himnos feministas y liberadores como ‘Contigo‘ a sus espaldas, Isa nos habla de un pasado de lucha y un futuro esperanzador.

Pregunta: Lo primero, muchas gracias por la entrevista, que sé que tienes un montón ahora y que vas justísima.

Respuesta: Gracias a ti. Gracias a ti.

P: Bueno, enhorabuena por ‘Nunca Canto Sola’. La verdad es que personalmente me ha encantado. Es el segundo single adelanto de su próximo disco «Incendio», que sale en mayo. La primera vez que yo escuché la canción, de esto que todavía no la has asumido bien, para mí fue un golpe impresionante, porque como que de repente me di cuenta de la relevancia que tienen las mujeres en mi vida, hasta el punto de que siempre va a haber una dispuesta ayudarte y es algo que creo que se trata muy, muy, muy bien en esta canción. Quería preguntarte qué importancia tiene para ti el poder hermanarte con otras mujeres, trabajar con otras mujeres y ese sentimiento de hermandad que tanto nos une y tan fuertes nos hace.

R: Pues jo, me encanta que me digas eso porque es como mi objetivo provocar esa movida, ¿sabes? Y a la vez me sorprende, aunque no tanto, pero veo que cada cual lo interpreta un poco diferente, ¿sabes? Es una canción que para mí hablaba de una cosa muy amplia, que es esa misma sensación que tú cuentas como de, joder, reconocer y apreciar la fuerza que me ha dado a mí en mi vida el contacto con una serie de personas, con el movimiento feminista y con distintos movimientos también incluso por lucha por la justicia social. Como que yo tenía mente a la vez a mis amigas, o sea a mi familia escogida como la gente a la que quiero y que siempre me acompaña, tenía en mente a quienes me han precedido pues desde mi entorno más cercano hasta pues, yo que sé, todas las personas que han estado peleando en distintos movimientos desde hace muchísimo tiempo y que no forman parte de esa historia que está escrita en los libros, pero que si hoy podemos disfrutar de las mejores partes de nuestra vida, pues digamos que eso tiene que ver con que ha habido gente que ha estado abriendo camino. Y yo pensaba no sólo en muchas mujeres, aunque obviamente sobre todo estaba pensando en eso, pero también estaba pensando en toda esa gente excluida, como en todas esas identidades subalternas.

P: Sí, las que se quedan de lado.

R: Claro, toda esa gente que está excluida, que está perseguida. Encima también con todos los debates que está habiendo ahora, bueno, o con unos debates que están teniendo mucha visibilidad dentro de los feminismos con todo esto, por ejemplo, de las identidades trans. Y yo pensaba mucho en toda esa gente que a lo largo de la historia, sólo con su existencia, ya han abierto caminos de libertad para el resto, porque toda esa gente que no encaja y que a pesar de todo vive en su diferencia y lo pelea por dignidad o porque no le queda otra, que al final acaba siendo lo mismo muchas veces. Pues gracias a esa gente nosotras podemos existir y podemos existir de una forma más libre, más entera. Entonces es como que yo quería hablar de todo eso. Y porque hay una cosa que creo que es como una obsesión mía y que atraviesa toda mi música, que es hablar mucho de la idea de que no existimos solas. O sea como que creo que haya una idea muy extendida en nuestra cultura, y en todas las partes de la ideología dominante en nuestra cultura, que es esta idea de que las personas existen solas. El ideal de la vida humana es algo así como la autosuficiencia, la independencia absoluta, no depender de nada ni de nadie y ser libre, ¿no? Esa libertad de la que tanto habla, por ejemplo, Ayuso ahora. Pero bueno, que es la libertad del neoliberalismo.

P: Y lo peor es que no es nada nuevo.

R: Esa idea de lo que es la existencia humana me parece sumamente destructiva, porque las personas no existimos solas, existimos con las otras, con las otros, con les otres, existimos en el contacto con con el resto. Entonces me parece superimportante tratar esa idea, porque creo que nos destruye, nos destruye individualmente y nos hace bien también como sociedad, y esto es algo que es un tema sumamente actual, obviamente. Entonces en general en todas las canciones ando obsesionada con estos temas desde que empecé, ahora también, pero en esta canción es un tema bastante central y el título lo dice mucho, ¿no? Pues es que nunca canto sola. Es que nada de lo que hago lo hago yo sola. Es que nada de lo que pienso lo pienso yo sola, nada de lo que escribo lo escribo yo sola, sino que siempre lo hago inspirándome de otras, tomando ideas que he aprendido de otras… de otras, de otros, de otres. Y es algo que quise reflejar de una manera amplia en esa canción y también hablando de esto de lo común, desde un lugar constructivo. Reivindicando lo común no desde la carencia, no desde el dolor, no desde la rabia, que es algo que creo que desde los activismos es un lugar que conocemos ampliamente. Pues yo quería salir un poco de ese lugar y hablar de toda la parte nutritiva. Es lo que he querido reflejar en esta canción, como algo más cálido, como algo que tiene más que ver con el hogar que yo encuentro, por ejemplo, en los feminismos, pero también hay muchas otras formas de enfrentar la vida.

P: Creo que tiene mucho que ver con lo que dices, ¿por qué crees que sigue sin haber la suficiente representación de todas estas identidades de las que estamos hablando, que siguen marginalizados y a un lado, dentro de la industria musical? Y ya no solo como cantantes, sino dentro de los roles que hay en una discográfica o la organización de conciertos. Se sigue teniendo a estas identidades y a las mujeres como en un lado, muy aparte.

R: Sí, sí, y además, incluso ahora está saliendo esta categoría de lo femenino, la música femenina, las cosas para mujeres, que son esas movidas de las que se habla el 8 de marzo y el resto de la vida pues no existen. Entonces, claro, obviamente soy muy crítica con esto. Yo creo que el hecho de que haya invisibilización, de que haya exclusión y de que haya una falta de reconocimiento en la industria musical tiene que ver con lo que hay en todos los ámbitos de la sociedad, ¿no? Que es que digamos que hay una jerarquía en la que se tiende a valorar las cosas que se asocian a una identidad masculina muy concreta y tiene que ver con valores de mérito, pues capitalista, liberal, sí, esta identidad de… Es que es que no te quiero soltar el típico rollo teórico que está como muy trillado, ¿no? [risas] Pero creo que sabemos lo que es la masculinidad tradicional, cómo se relaciona esto con el racismo, cómo se relaciona eso con el clasismo y con la violencia económica y al final eso hace que tiene que haber una parte de la humanidad que esté devaluada y que sea explotable. Bueno, y esto podría hablarte muchísimo, pero la verdad es que hay gente que habla muy bien de estos temas. Pero bueno, o sea, por hacer un resumen. Yo creo que tiene que ver eso, con una sociedad en la que existen unas jerarquías que se tienen que armar en base a una serie de valores culturales en las que toda la gente que no son hombres blancos, cis, jóvenes con más capacidades, etc., pues todo eso se devalúa para convertirlo en un algo explotable, ¿no? Entonces así funciona este mundo y por eso estamos tan enfadadas.

P: Volviendo a las dos últimas canciones que he sacado, ¿crees que ha habido algún cambio en la forma que tienes de componer música como cantautora desde que publicaste ‘Contigo‘ y ‘Se Quemó‘ hasta estas dos últimas, ‘Nunca Canto Sola‘ y ‘Selvática‘?

R: Ya lo creo [risas]. Sí, sí. A ver, una diferencia clara es que yo empecé a hacer música sin tener mucha idea de música. O sea, como que yo no era música. Yo era una comunicadora, yo tenía cosas que decir. Cojo una guitarra y hago canciones, pero yo no sabía ni cantar muy bien ni tocar muy bien, que cualquiera que escuche mi maqueta lo puede observar, y creo que se podría decir que en mi maqueta yo era una activista que hacía canciones. En mi primer disco, era una activista y poeta haciendo canciones. En mi segundo disco era un activista poeta y empezaba a haber algo de música haciendo canciones, y creo que este es el primer disco, «Incendio«, en el que comienzo a hacer una música que hago canción. Mi intención es, junto a esto de estar empezando a considerarme música, no perder lo activista ni perder la poesía, porque es que son cosas que, aparte de que forman parte de mí, me parece que son necesarias y que también son la esencia de este proyecto, que es La Otra.

P: ¿Cómo ha sido empezar a formar parte de Propaganda Pal Fet?

R: Para mí ha sido un alivio, porque al final, en esto de empezar a estar cada vez más en el oficio, que claro, ahora llevo 10 años, pero bueno, más profesionalmente llevo a lo mejor 7 o así, porque, como te decía, yo no empecé con ninguna intención profesional y luego me pilló por sorpresa decir «vaya, pero si me puedo dedicar a esto de dar conciertos». Han sido muchos años de estar aprendiendo sobre la marcha, de pura autogestión y de encargarme de un montón de cosas que ni sabía cómo se llamaban esos trabajos. Entonces, con los años, por suerte, voy descubriendo que hay cosas que son tareas que hay que saber hacer, que cuando las hace gente que sabe, sale todo mucho mejor. Entonces, currar con Propa está siendo un poco ese por fin poder delegar. Curro con ellos, curro también con Gazpacho, que es mi oficina original, curro también con Tótem. Como que voy teniendo un equipo de gente, que hay gente que se encarga del booking, hay gente que se encarga de la distribución digital, de la prensa… Para mí está siendo guay poder ir armando las patas de esta estructura que al final es pues eso, que en esto de profesionalizarse y de querer construir y que el proyecto crezca, pues vale esto de poder delegar y contar con un equipo de peña que sabe hacer lo que hace y no tener que hacerlo todo yo, que también es un alivio, porque yo lo que quiero es hacer música, no otras cosas en las que por desgracia me he tenido que ocupar demasiado en los últimos años.

P: Ya para acabar hablándote más, he decir la verdad, como fan que como periodista, cuando salió ‘Contigo’ hace ya bastantes años, que evidentemente creo que nunca dejará de ser un temazo, yo tendría como 17, 18 años y empezaba a formarme en feminismo, empezaba a formar parte de asociaciones feministas, pero, claro, yo en ese momento seguía muy metida en el cánon romántico de relaciones tóxicas, pero que aún así cuesta mucho identificar y ver que estamos metidos en esa dinámicas y como que para mí tuvo el poder de encender algo y decir «oye, pues quizá es lo que dice esta canción como me debería sentir cuando comparto mi vida con alguien y no las cosas que estoy haciendo ahora mismo. La verdad es que para mí fue un referente en el seguir formándome en ese tema. ¿Crees que dentro del mundo de la música hay suficientes referentes que nos puedan hacer plantearnos las cosas así? ¿O se tiene que seguir trabajando muchísimo en esto?

R: Jo pues lo primero, me emociona lo que me has dicho, porque creo que en esto de deconstruirse, y es algo de lo que hago muchas bromas en los conciertos ahora, creo que nunca se acaba y que por desgracia estamos, con esto de que no vivimos solas, sino que vivimos con las otras y vivimos con lo que nos rodea, todo tiende hacia que nos vayamos hacia rollos supertóxicos, superasfixiantes. No vivimos en una sociedad saludable ni justa en ese sentido, entonces creo que nunca terminamos de librarnos de estas partes de la cultura, ¿no? Me ha gustado mucho lo que has dicho y bueno, creo que no hay suficientes referentes. Claramente no hay suficientes referentes, porque si hubiera suficientes, pues no te estaría diciendo esto. y no opinaría esto de que vivimos en una sociedad enferma en muchos aspectos. Y encima con todo esto que se está viendo, con este momento histórico apocalíptico que vivimos, es que empieza a ser cada vez más obvio que hay demasiadas cosas que no están funcionando bien, digamos que no están triunfando las fuerzas armoniosas del ser humano, ¿no? Creo que hay mucho que hacer en ese sentido. Creo que estamos en un momento en el que se está estableciendo una victoria cultural del feminismo, de los feminismos y también de algunos otros valores por la justicia social, especialmente feminismos, pero queda muchísimo por hacer. Algunas victorias culturales, el hecho de que ahora digamos que ser feminista en ambientes medianamente progresistas sea lo políticamente correcto, esta victoria que hemos arrancado es sólo un comienzo, porque, vale, en lo simbólico hemos conseguido esto, pero lo material sigue estando como está, la vida de la mayor parte de las mujeres, pero no sólo de las mujeres, sino de ese sujeto amplio que ahora conforma los movimientos feministas. Es que sigue siendo muy difícil vivir en este mundo, entonces queda por hacer, pero, bueno, estamos en un comienzo.

P: Esperemos que sea el comienzo de algo importante y seguir adelante, que es lo que toca. Así que muchas gracias por la entrevista, Isa.

R: Pues un placer, Sara, me ha gustado mucho la entrevista. ¡Un abrazo!